¿Te has parado a pensar alguna vez por qué hay personas que se sienten seguras y logran sus objetivos y otras no? Entre otros factores, las habilidades sociales son fundamentales para alcanzar el éxito.
“Ha tenido suerte”, “se lo han puesto muy fácil en la vida”, “tiene padrinos” son algunas de las frases hechas a las que solemos recurrir para referirnos a aquellas personas que disfrutan de una situación privilegiada.
Y efectivamente, no podemos negar que existen personas que tienen un camino más llano que otras para hacer posible sus sueños, bien por su posición social o por económica.
También habrás podido comprobar que algunos no se benefician de estas ventajas “a priori” y sin embargo llegan incluso más lejos que los que cuentan con importantes medios a su alcance.
¿Dónde se encuentra la clave que nos hace sentir más seguros tanto en el ámbito personal, como en social?
La importancia del aprendizaje
Nacemos con un bagaje genético (temperamento) y las experiencias que tenemos modelan nuestro carácter, consolidando la personalidad al final de la adolescencia y juventud. En base a nuestra predisposición temperamental y lo aprendido, desarrollamos un talante determinado con un estilo de afrontamiento eficaz, capaz de encarar las situaciones más adversas.
Un factor importante, es que sepas defender los derechos asertivos que tenemos todas las personas, pero que no se transmiten explícitamente ni con la suficiente claridad.
Puedes ver el siguiente vídeo sobre cuáles son los derechos asertivos y cómo aplicarlos.
En la juventud, debido a la gran influencia que tiene el grupo de iguales, se suelen tener dificultades para “decir no” y consentir situaciones de riesgo o no saludables, por miedo a queados por el grupo. Algunos jóvenes interactúan con un estilo de comunicación pasivo, dejando que sean los demás quien tomen sus decisiones o bien, se comunican con un estilo agresivo.
A pesar de estar más preparados en competencias, habilidades técnicas y destrezas motoras, les cuesta solucionar problemas, utilizar la comunicación asertiva y defender sus derechos y en muchos casos no han adquirido las suficientes habilidades sociales para desenvolverse en nuestra sociedad sin tensiones. Esta manera de interactuar con los demás es conveniente aprenderla para relacionarse con las demás personas de forma satisfactoria y alcanzar los objetivos.
En cuanto a los adultos, podemos observar cómo en ocasiones nos comportamos con firmeza y seguridad y en otras, en cambio, nos mostramos inseguros. ¿Quién no ha comprado algo en su vida que no quería, no ha sido capaz de cortar una conversación, o ha aguantado a un superior o un familiar que nos hablaba de forma peyorativa?
Todo ello es consecuencia de no saber cuáles son nuestros derechos ni saber cómo defenderlos. Además, es importante tener claro cuáles son nuestros valores personales, profesionales y sociales, aquéllos que dan sentido y significado a nuestra vida y con los que debemos ser coherentes, si queremos un equilibrio. Si estamos alineados con nuestros valores, tendremos más fuerza para expresar lo que deseamos, necesitamos o bien rechazamos. Sin embargo, los valores y las habilidades sociales no son innatos, sino que se han de aprender.
Las personas de éxito adquieren competencias para lo que se proponen, eligen lo que desean y lo van a buscar con motivación, perseverancia y pasión.
En qué consisten estas habilidades para el éxito
Las habilidades sociales consisten en una serie de competencias que desplegamos en función del contexto y de la persona o grupo de personas que tenemos delante.
Puedes ver un resumen en el siguiente vídeo.
Las habilidades sociales consisten básicamente en:
- Ser conscientes de nuestro lenguaje corporal y los componentes de nuestra voz y saber gestionarlos. Te dejo un vídeo sobre el lenguaje no verbal.
- Expresar lo que sentimos o queremos decir en clave de primera persona “YO” pienso, creo, opino…
Saber decir no, o aplazar nuestra respuesta hasta que lo tengamos claro: Ahora no lo sé, ya te lo confirmaré mañana…” - Aprender a recibir cumplidos y a expresarlos a los demás: “Muchas gracias, me alegro”
- Hacer quejas de forma asertiva y recibirlas: “Cuando llegas tarde, me siento…”
Pedir información o aclaraciones: “¿Qué quieres decir con que soy un impresentable?” - Interactuar con alguien para tener más probabilidades de gustarle: “Hola soy Pepe y me gustaría invitarte…”
- Responder a los demás con técnicas asertivas para saber manejar y/o neutralizar el poder de las personas con estilo agresivo
- Saber liderar un equipo, con un liderazgo transformacional, sirviendo de modelo
- Expresarse frente a un grupo con asertividad
- Comunicar las ideas y/o proyectos en público, persuadiendo
- Tener capacidad para comunicar a los demás lo que crees y sientes que es injusto de forma asertiva en el momento oportuno
- Conocer los estilos de comunicación y diferenciarlos: Os dejo dos fragmentos de la película “Mejor imposible” en la que podemos observar cómo una misma persona puede tener un estilo u otro (agresivo, pasivo y asertivo)
En este primer vídeo podrás ver los estilos agresivo y pasivo.
En el segundo vídeo, el que antes se comportaba de forma pasiva pasa a comportarse de manera asertiva.
En este vídeo de TEDxCreativeCost, Celeste Headlee nos da 10 sabias reglas para mejorar nuestra conversación.
Hay que diferenciar el comportamiento de personas que carecen de estas habilidades de las que saben interactuar, pero no pueden porque la ansiedad les bloquea y les impide comportarse como desearían. En el primer caso, las habilidades sociales se han de aprender y en el segundo, es preciso abordar la ansiedad para que la persona pueda expresarse.
Los beneficios de aprender habilidades sociales
Las personas que tienen éxito y se sienten satisfechas muestran buena actitud, autoestima, confianza, flexibilidad, tolerancia y afabilidad.
Al mismo tiempo, suelen ser altruistas y tienen un sentido de pertenencia con la sociedad. Por todo ello, aportan su granito de arena y comparten lo que han recibido. Adquieren competencias para lograr lo que se proponen, eligen lo que desean y lo van a buscar con motivación, perseverancia y pasión. Son capaces de distinguir a las personas que intentan frenar la consecución de sus metas y a las que les sirven de empuje y ayuda para conseguirlas.
Otras personas muy hábiles utilizan sus encantos para manipular a los demás y llegar a alcanzar el éxito social y el poder. Sin embargo, estas personas que no poseen esos valores éticos sociales no aportan un beneficio a la sociedad.
La ventaja, a nivel general, es que aumenta nuestra posibilidad de mantener unas relaciones interpersonales satisfactorias al comunicarnos con un estilo asertivo, que nos permite alcanzar nuestros objetivos.
Mis recomendaciones:
- Observa si sabes defender tus derechos y cómo lo haces.
- En esta semana, presta atención a los comentarios que te dirigen las personas en su comunicación: si se quejan, si te hacen cumplidos, peticiones, etc. y cómo lo hacen
- Al revés, también. Presta atención a cómo te diriges tú a los demás y cuál es el estilo que más usas
- Analiza si haces cosas que no quieres, o aceptas tareas que no deseas por no saber decir “no”
- Decide. Hay dos formas de decidir: decidir tú o dejar que decidan por ti.
- Presta especial atención al lenguaje no verbal (mirada, expresión facial, sonrisa, …)
- Practica el agradecimiento, la empatía y la escucha activa.
- Disfruta en tu día a día y evita cometer algunos errores ilustrados en el siguiente vídeo
Si te interesa mejorar en estas competencias, puedes contactar conmigo, escribiéndome bien por mail, Telegram o whatsApp.