Terapia de pareja

" La Paradoja del amor es, ser uno mismo, sin dejar de ser dos".

Erich Fromm

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Terapia de pareja

Es difícil conocerse a uno mismo, y convivir con la pareja requiere más que amor. Saber y conocer las claves del éxito, forma parte de una relación satisfactoria.

​Vivir durante muchos años juntos no es suficiente. La calidad de la relación sin duda, va a repercutir en nuestro bienestar. Por este motivo, en muchas ocasiones la prevención es la mejor opción, y una manera de evitar tener que solucionar los problemas "a posteriori", puede ser un buen asesoramiento por profesionales especializados para no necesitar una terapia.

Así pues, el psicólogo/a puede ayudar a la pareja mediante el asesoramiento y/o tratamiento de los diferentes conflictos.

El objetivo

Proporcionar buenas herramientas para favorecer el bienestar, el entendimiento y la negociación en etapas de crisis. Enseñar estrategias para disminuir los conflictos en el caso de querer seguir juntos, para poder sentir viva la relación. Ejemplo o de épocas en las que las circunstancias o maneras de ser no favorecen el acercamiento de la pareja, puede ser el perder el espacio de la pareja por la llegada de los hijos, no haber diseñado que tipo de familia deseamos, los cambios ante la llegada de un bebé, o un estilo tóxico que no detectamos y va minando la relación.

La ruptura de la pareja

​Después de romper con una pareja, puede ocurrir que se asimile la situación y se haga el duelo bien hecho, o bien que inmediatamente se conozca a otra persona, entrando en otra relación. En este último caso se dificulta el proceso de maduración y crecimiento personal, por lo que es probable que la nueva relación pueda tener déficits que lleven a otra crisis y finalmente la ruptura.

En estos casos en los que se deja un espacio entre relación y relación, nos sirve para encontrarnos a nosotros mismos, y superar la crisis por nosotros mismos, no apoyándonos en un "salvador o salvadora", y no teniendo nuestro tiempo y espacio para reflexionar y adquirir más seguridad en nosotros mismos.

En estos casos de separación, hasta normalizar la nueva situación, hay personas que necesitan recurrir a la ayuda de un psicólogo/a para superarlo y madurar, a modo de guía o acompañamiento en este proceso.

Familias reconstituidas

Cuando se ha superado con éxito la ruptura, se está preparado/a para iniciar una nueva relación. Hay situaciones en las que se constituye una nueva familia, en la que tienen un peso importante, si los hubiera, los hijos de uno o de ambos miembros de la pareja.

En estos casos hablamos de las familias reconstituidas.  Es muy recomendable seguir unas directrices o pautas de buenas prácticas para ayudar tanto al padrastro o a la madrastra a ejercer su nuevo rol. Los hijos de anteriores relaciones necesitan también de un periodo de adaptación para lograr la estabilidad en este marco familiar.

Este proceso de conocimiento de todos los miembros es más fácil cuando son pequeños, que en el caso de tratarse de hijos/a adolescentes. En esta etapa, les cuesta por norma general aceptar tanto a la nueva pareja, como a los hermanastros y pueden comportarse de forma rebelde y desafiante.  

Cuando es necesaria una terapia

Si hemos intentado en varias ocasiones solucionar los problemas que nos generan estrés, y no lo hemos logrado, es el momento de pedir ayuda psicológica. Esto no significa que no seáis inteligentes o que no haya alternativas para solucionar lo que os preocupa. La Terapia Integral Conductual de Pareja como terapia de tercera generación os puede ayudar, ya que se adapta a las vivencias de cada pareja. Estrategias como la aceptación y la tolerancia (no resignación) sitúan a esta terapia como más eficaz que las anteriores que ponían más énfasis en el aspecto conductual.

Si crees o creéis que os puedo ayudar, llámadme al 687562197 o enviarme un correo y os informaré sin ningún compromiso. Si lo preferís también podéis visitarme en la Carrer de Muntaner, 272, P. 1 PTA. 3 de Barcelona .